Descubre 10 pueblos del Pirineo Francés de cuento

Cruzar la frontera natural que suponen los Pirineos siempre es un cambio de aires: aunque parezca más bien un puente de naturaleza que nos lleva a la vertiente norte de la cordilla con continuidad, lo cierto es que entraremos en Francia, un país con otra lengua, otras costumbres, otros horarios, otra gastronomía. Podremos sentirnos lejos, estando muy cerca.

Y, al mismo tiempo, el Pirineo Francés es un auténtico paraíso para los amantes de los deportes de aventura, de la naturaleza más salvaje y genuina. Aquí tenemos muchas opciones para practicar un turismo activo en verano, con paisajes de un verde intenso y de lo más refrescantes, y en invierno, puedes esquiar en el Pirineo Francés en importantes estaciones de esquí y realizar espectaculares fotografías con las montañas cubiertas de blanco.

Entre tanta acción, os traemos una lista con los pueblos más bonitos del Pirineo Francés que no pueden faltar en tu viaje en cualquier época del año. Lejos de los enclaves turísticos más famosos de Francia, París y la Costa Azul, nos adentramos en su cultura, arquitectura y urbanismo más rural. Toma nota y déjate llevar por sus encantos.

 

Ainhoa, un pueblo mágico en el Pais Vasco Francés

Para muchos, es el pueblo más bonito de Francia, en el llamado País Vasco francés. De hecho, os sorprenderá su cuidada arquitectura tradicional vasca, con entramado y carpintería en colores rojo y verde en claro contraste con sus fachadas. Originalmente, este pueblo no era tal, sino un simple hospedaje para peregrinos. La Guerra de los Treinta Años hizo desaparecer el edificio y, entre los siglos XVI y XVIII, se empezó a construir el pueblo que conocemos en la actualidad.
¿Qué podemos visitar en Ainhoa, uno de los pueblos con encanto del Pirineo Francés? Pasea por el centro del pueblo, sin rumbo y admirando cada calle y cada edificio que se alza a tu paso; visita la iglesia Nuestra Señora de la Asunción; no dejes de pasar por su peculiar cementerio; y no te pierdas el típico frontón.

Descubre la belleza costera de Saint-Jean-de-Luz en los Pirineos

Nos vamos a la costa para visitar un pueblo que os enamorará, muy cerca de San Sebastián. Entre el mar y la montaña, tenéis que recorrer su precioso paseo marítimo Jacques Thibaud de la Grande Plage, con pasarelas y puentes con los que las casas de la zona acceden a la playa. En la bahía os entusiasmarán los vivos colores que reinan y jardines cuidados al detalle como el de Paul Jovet, en un enclave único: en lo alto de un acantilado.
No puede faltar un paseo por el casco antiguo de Saint-Jean-de-Luz, donde dos puntos de interés imprescindibles son la casa de Luis XIV y la iglesia de Saint-Jean Baptiste.

Un paraíso invernal en los Pirineos: Saint-Lary Soulan

Este pueblo del Pirineo Francés comparte nombre con la famosa estación de esquí, si decides esquiar en Saint Lary, descubrirás un icono del esquí alpino con más de 100 kilómetros de pistas, así como del freeride y del esquí nórdico. Un completo destino para practicar deportes invernales.
Pero que nadie se lleve a engaño: no es un municipio artificial, típico de las estaciones de esquí. El municipio, a 830 metros de altitud, conserva intacto su toque tradicional y atractivos como sus calles singulares, sus entramados de madera en las fachadas de piedra o el campanario. Además, es un pueblo de lo más animado. Durante el año, acoge varios encuentros “musher” (de trineos tirados por perros) y se celebran eventos como el Festiflocon. Una vez aquí, dejaos caer por Soulan, que forma parte del municipio, y es una ciudad-balneario.

Explora las maravillas termales de Ax-Les-Thermes

Nos acercamos a un precioso pueblo del Pirineo Francés que es conocido por dos cosas: sus aguas termales y la colosal estación de esquí Ax-3-Domaines. Así que ya sabes cuáles son los dos imprescindibles de tu parada por este municipio. El centro termolúdico de “Les Bains du Couloubret” tiene una gran superficie de 3.000 metros cuadrados de bienestar, con aguas que emergen a entre 33 y 38 grados y con muchas propiedades; el complejo también tiene casino, centro de congresos y pista de hielo.
La estación de esquí alpino tiene pistas entre los 1.400 y los 2.400 metros de altitud y una orientación atlántica que favorece unas buenas condiciones de la nieve durante toda la temporada. Un lugar que te enamorará por sus paisajes, cornisas y palas de infarto. Descubre aquí ofertas de alojamiento y forfait en Ax 3 Domaines.

Gourette, la puerta de entrada a emocionantes escapadas alpinas

Un pueblo bonito francés en el que nos embelesará el sorprendente paisaje del Valle d’Ossau. A solo 50 kilómetros de la frontera con España –a la altura de Formigal- te espera un municipio con mucha autenticidad, un clima bastante soleado por su orientación sur y unas vistas increíbles desde los 1.400 metros de altitud, en las laderas del Aubisque y en el corazón del circo de Gourette, que configura una especie de anfitreatro natural de cimas de más de 2.500 metros de altura.
Además, aquí está la estación de esquí centenaria que lleva el mismo nombre, Gourette, y donde alrededor de un 60% son esquiadores locales del valle. Esquiar en Gourette es sinónimo de pistas con buena calidad de nieve y pocas aglomeraciones.

Les Angles, un pintoresco paraíso para los amantes de la naturaleza

¿Te imaginas un pueblo al que puedes llegar desde la montaña con los esquís puestos? Ese es Les Angles, en el Pirineo Francés. Se trata de una estación-pueblo con casco antiguo hasta el que puedes llegar con las botas de nieve. Mezcla tradición y modernidad, la tecnología de los remontes con productos de granjas de los alrededores. Contrastes que dan vida a un pueblo de lo más animado.
Uno de sus grandes atractivos, además de pasear por sus calles, es Angléo, un área de bienestar acuático con piscinas y muchas otras instalaciones, para tomarte un merecido descanso después de darlo todo en las pistas donde esquiar en Les Angles.

Explora encantos medievales en Vilafranca de Conflent

Solo te diremos que está declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la UNESCO. Es uno de los pueblos más bonitos del Pirineo Francés, donde destaca su muralla y puerta fortificada que envuelve la fortaleza del pueblo, el Fuerte Liberia. Sentirás que vuelves a la época medieval, pero con todas las comodidades de la actualidad.
Está encastrado en un valle por el que discurre el río Têt y vale la pena simplemente callejear por sus calles medievales y pintorescas llenas de encanto.

Un viaje espiritual al Pirineo Francés: Lourdes

En una lista de recomendaciones de pueblos bonitos en el Pirineo Francés no puede faltar un precioso y popular destino de peregrinaje como es Lourdes. Comuna francesa enclavada en los Altos Pirineos, se dice que aquí se le apareció la Virgen María a la niña Bernadette en el siglo XIX, momento desde el cual adquirió una gran fama.
Es visita obligada el Santuario de Lourdes y la Gruta de Massabielle, donde supuestamente tuvieron lugar las apariciones. Lugar bonito y curioso, tanto si te crees la leyenda como si simplemente quieres apreciar el entorno natural. También vale la pena ver el Castillo de Lourdes y su torre defensiva, que en su interior tiene un museo de artes y tradicionales populares de los Pirineos.

Cauterets, donde la naturaleza y la aventura conviven en los pirineos

Una joya del Pirineo Francés cerca de Huesca, con balneario incluido y punto de salida de muchas rutas por las montañas. El encanto del pueblo radica en sus edificios estilo Belle Época, con arquitectura típica del siglo XIX manifiesta en muchas fachadas, o la estación de tren antigua, que hoy alberga un salón cultural. También es conocida la estación de esquí, aquí podrás encontrar diferentes ofertas de esquí en Cauterets.

Rastreando los tesoros históricos en Saint Bertrand de Comminges

Si algo destaca en este increíble pequeño pueblo medieval del Pirineo Francés es su espectacular catedral, que podremos divisar desde cualquier punto del municipio. Un destino para conocer la Francia más rural y por donde pasan los peregrinos del Camino de Santiago.